Cuando tenía 14 ó 15 años me compraba cualquier cinta de cassette que contuviese canciones de los 60 ó de los 70. Cuando llegaba a casa, la colocaba en el reproductor y la escuchaba con la emoción de que, en cualquier momento, surgiese esa canción que me atrapase desde sus primeros acordes. Cuando alguno de estos regalos aparecía (y fueron muchos), me aprendía la canción y, después, me encerraba en el baño a cantarla a grito pelado. La de veces que habré cantado ésta...
2 comentarios:
ah! la voracidad de los 15 años... inmensa! buenos fundamentos adquiriste, sí señora.
Buen tema!
Recuerdo que Muchos discos los elegía solamente por la portada e intuía la música que contenían,rara vez me he equivocado.
Abrazo y saludos afectuosos!
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